sábado, 22 de marzo de 2008

Cuando la Misión se hace parte de ti...

Antes de comenzar a relatar mi experiencia, quisiera explicar el significado de la fotografía...





Esto es lo que se entrega cuando misionas: bendición, redención, regazo... el amor propio, el amor de Jesucristo...

Ok, comienzo:

(Fuffa, ahora si que leerás mi experiencia XD)

Fue una semana de febrero, donde sentí uno de los llamados mas importantes que una persona puede haber sentido, el ser siervo de una gran misión, la de enunciar la propia palabra de Dios en muchos hogares donde esta misma esencia, se hace escasa, y así es, fui precisamente a misionar a un pueblo ubicado cerca de San Vicente de Taguatagua, que a su vez este queda cerca de San Fernando y Rancagua, en la VIª Región de nuestro Libertador Bernardo O'Higgins llamado Pencahue. Es aquí donde me desempeñé como discípulo de Nuestro Señor y me enaltecí de espíritu, fue donde pude experimentar en carne propia el amor del pueblo, el amor de la gente que vive en el campo, con la tierra, esa que nos da que comer, la que nos proporciona el oxígeno para vivir, esa que nos da colores que deleitan nuestra vista, esa que con sus frondosos campos nos proporcionan descanso, en fin... si la naturaleza es tan infinita como el misterio humano... parecen dos campos infinitos uno separado del otro, pero que a la vez tienen un vínculo intrínseco...

Fue tan calurosa la bienvenida de esta gente, que debo decirle que es gente muy humilde, muy sencilla, muy honrada, con muchos problemas de salud algunos, podría decir que una importante mayoría, ya que muchos eran ancianos, aunque tenían muchos la fortuna de tener lo necesario para comer, ya que viven prácticamente de la tierra que les da los alimentos, aunque lamentablemente ésta no les puede dar lo suficiente para tener una salud adecuada, muchos padecen de enfermedades muy complejas, problemas en las articulaciones, en los huesos, en la sangre, etc... pero había una parte de sus vidas en el que estaban rebosantes... su espíritu ferviente...

Su fe hacia Dios era tan grande, que nos llegaban a contagiar a nosotros, si pareciera que ellos nos daban la fe que necesitábamos para hablarles de nuestra tarea, de compartir con ellos un pedacito del evangelio, que en los ojos se notaba el efecto notable que les provocaba, la palabra es mágica, proporciona aliento, motivación, pero que no dirige hacia una nada, sino hacia un camino de salvación, que está aquí mismo, al lado de nosotros... Jesucristo.

Aún llevo grabados en mi mente imágenes de señores que con tanto cariño nos preparaban unos platos tan exquisitos por la llegada de nosotros, como no recordar ese tomate que se comía solo cuando eramos unos niños, ese tomate jugoso que llegaba a chorrear por todos lados, y sí, reviví esos momentos de mi infancia, sobretodo cuando iba al campo de mis tíos, y me daban una ensalada de tomate que el jugo llegaba a rebosar la fuente, tan rico... el resto, se lo dejo que lo imaginen ustedes...

Es verdad, la vida te da mucho con que disfrutar, yo pensé que no tendría vacaciones, toda mi familia partió de vacaciones a algún lado, menos yo, por cosas de buscar trabajo me quedaba aquí en Santiago, sin conseguir nada, pero Dios me envió esta experiencia tan hermosa, que me sirvió para todo, fue un complemento vital, ese carisma que recibes, es verdad que el dinero no es nada, si tienes para comer, para vivir, para respirar, para ver, para dar...

Es por esto, que quiero invitarlos a todos quienes lean este escrito, a que si alguna vez en sus vidas tienen la oportunidad de entregar un poco de su tiempo, en algún trabajo comunitario, lo hagan, no solo estarán aportando un grano de arena en el desarrollo de nuestro querido País, sino que también se llevaran a su vida una experiencia que sólo se obtiene en ese tipo de actividades, y que repercute en todo sentido a sus queridas vidas, así que la invitación esta hecha, para que al menos piensen la oportunidad si se brinda...

Con esto quisiera terminar:

"No hay amor más grande que entregar su vida por los amigos" (Juan 15,13)

Un abrazo para todos

miércoles, 12 de marzo de 2008

Me encontré conmigo mismo...


Bueno, la verdad es que esto lo escribí en un comienzo en mi fotolog, pero quisiera compartirlo con quienes leen con mucho cariño mi blog...

Aquí está:

Hoy fue un día bastante raro, pero lleno de sensaciones y nostalgia centradas en la llegada a la universidad, ver entrar a muchos como yo el año pasados, ansiosos, con ganas de saber que viene, con mucho susto, un poco de que te apreta el estomago, pero feliz de encontrarte con tanta gente que quiere muchas cosas que tu también quieres, entre esas te topas con gente así de pura casualidad que de la nada surgen conversaciones que se convierten en vínculos intrínsecos que permiten el fluir de la mente y el alma, surgiendo afirmaciones vitales y momentos en que dices... si, me gusta lo que estudio...

Entre todo eso, me paso algo extraño, vi tanta gente que se parecía a mi... por que? (me refiero en lo físico, para ser mas claro, en mi rostro) que significa? en que me afectara en mi desarrollo.. aaaaah! Profe me mataste con tus cuestionamientos!! creo que seras mi amor platónico jajaja, que cuatico...

A todo esto, que estúpido, escribo cosas naa que ver con el titulo, me fui por una parte de mi dia extraño que no quería contar... bueno, me paso...

La cosa es que entre medio de todo eso, te vi, si a ti, te preguntaras si eres tu, si eres tu... te vi en el suelo verde, en el cielo azul, en la vegetación que mira en dirección hacia donde todos iremos alguna vez... hacia allá... donde estas tu cuando te necesito y no estas...

Todo esto debería ir a mi blog... bueno, ya no fue...

Solo se, que hoy fue un día en que me encontré mas que nunca conmigo mismo, y te pude ver a ti... bueno... sera como Dios quiera lo que sigue... amen

Te amo Bubita, de verdad que te necesito ahorita...